Dedicatorias

Muchos de los libros de la biblioteca personal de Buero están dedicados por sus propios autores, lo que pone de manifiesto las relaciones de amistad que tuvo con las personalidades del mundo de la cultura más relevantes del momento. Como muestra se presentan las obras de dos autores (antagónicos en lo político) como el monárquico José María Pemán (1897-1981) y el socialista Max Aub (1903-1972), o una de los trabajos más conocidos del Nobel Jacinto Benavente, Los intereses creados, firmada por su autor.

Francisco Nieva, ya mencionado anteriormente, dedica a Buero su obra completa publicada por el Servicio de Publicaciones de la Junta de Castilla-La Mancha en una edición que estuvo al cuidado de Jesús Martín.

La comedia La senda iluminada está dedicada por su autor, el valenciano Fernando Vizcaíno Casas (1926-2003). Y como colofón una obra del dramaturgo toledano Antonio Martínez Ballesteros (1929-), a quien unía con Buero una buena amistad y respeto mutuo.

Además de por sus autores, la biblioteca conserva libros dedicados a Buero Vallejo por importantes críticos literarios e investigadores que actuaron en calidad de editores. En este caso figuran las firmas del crítico e historiador de la literatura española Andrés Amorós (1941-), muy ligado al mundo del teatro, y académico de la lengua Manuel Seco (1928-) en sendos libros de Zorrilla y Arniches, respectivamente.

  También se incluyen libros dedicados por el académico e historiador de la medicina Pedro Laín Entralgo (1908-2001), que también fue ocasionalmente autor teatral. Así como del escritor Francisco Umbral (1935-2007), que mencionó a Buero en muchas de sus columnas periodísticas; o del economista y novelista José Luis Sampedro (1917-2013) y del cineasta José Luis Garci (1944-).

La nómina de autores que aparecen en las dedicatorias de los libros es muy extensa y refleja el ambiente cultural español de la mayor parte del siglo XX. Estas firmas y textos autógrafos de escritores, periodistas, críticos, cineastas, etc. tienen un valor excepcional como testimonio personal y afectivo de todos ellos hacia Buero Vallejo.

  Más ejemplos se pueden disfrutar en obras como Teatro de Alejandro Casona, dedicada por el autor asturiano. El polifacético Fernando Fernán Gómez (1921-2007), hombre de cine y de teatro pero también prolífico escritor, dedica a Buero uno de sus libros. Otro tanto hacen el abogado y famoso autor Fernando Vizcaíno Casas y el crítico teatral y escritor Ignacio Amestoy (1947-).

  Destaca por último un texto en francés del dramaturgo español Fernando Arrabal (1932-), otro de los grandes renovadores del teatro de posguerra.